¿Por qué dar el salto europeo con nosotros?

En Sequoia Pro llevamos años ayudando a ayuntamientos, diputaciones y organizaciones sociales a pasar de la idea al proyecto financiable. Cuando hablamos de asesoramiento en proyectos europeos, no nos referimos solo a “explicar convocatorias”: nos implicamos en cada decisión clave para que haya encaje estratégico, calidad técnica y impacto medible en el territorio. Desde 2019 hemos acompañado más de 500 proyectos, con foco en medioambiente, gobernanza, inclusión, igualdad, infancia y cooperación europea. Ese recorrido nos permite hablar con claridad: un buen proyecto arranca con una necesidad real, una teoría del cambio sólida y un plan de viabilidad que anticipe riesgos.

Trabajamos como consultora de sostenibilidad con visión 360º. Eso significa que, además de conocer la mecánica de fondos europeos, entendemos las prioridades locales (participación, empleo, transición verde, bienestar) y las traducimos a paquetes de trabajo, indicadores y presupuestos elegibles. Nos gusta “aterrizar” la ambición en acciones concretas: si una ciudad quiere reforzar su educación ambiental, evaluamos qué línea de Erasmus+, CERV o Interreg tiene mejor encaje, qué socios suman valor y cómo demostrar impacto con evidencia.

En nuestro día a día, algo que se repite es la necesidad de ordenar bien la casa antes de presentarse. Cuando acompañamos a un municipio mediano, por ejemplo, empezamos con un diagnóstico express: prioridades del plan estratégico, madurez de consorcio, recursos disponibles y ventanas de convocatoria. Con esa foto, la conversación cambia del “queremos fondos” al “qué proyecto podemos ejecutar y justificar sin sobresaltos”.

 

Qué hacemos de principio a fin: del encaje a la justificación

Nuestro servicio de consultoría y gestión de proyectos europeos cubre el ciclo completo:

Detección de convocatorias

Hacemos scouting continuo para identificar líneas con elegibilidad real. No filtramos solo por temática; miramos criterios de evaluación, puntuación histórica, capacidad de cofinanciación y calendario. Si proponemos Horizon – cascade funding o AMIF, es porque vemos recorrido y evidencias de éxito.

Redacción y presupuesto

Redactamos la propuesta técnica y estructuramos el presupuesto con enfoque de value for money. Trabajamos lógica de intervención (objetivos, resultados, indicadores de impacto, actividades, entregables), riesgos y plan de explotación y diseminación. Aquí solemos incluir frases de terreno: por ejemplo, cuando decimos que garantizamos coherencia entre actividades y métricas es porque, en nuestra experiencia, los proyectos que se complican son los que no atan bien las definiciones de “resultado” y “producto”.

Consorcios y roles

Ayudamos a formar consorcios equilibrados, con líderes y partners que de verdad aporten. Coordinamos cartas de compromiso, perfiles y experiencia previa. Nuestro enfoque es transparente: preferimos un consorcio más pequeño, comprometido y con valor añadido, a una lista extensa sin tareas claras.

Gestión y control de calidad

Durante la ejecución, coordinamos reuniones transnacionales, seguimiento de paquetes de trabajo, y control de entregables y hitos. Aplicamos una metodología propia basada en mejora continua e “inspecciones rápidas”: revisiones ligeras y frecuentes que evitan desviaciones. En nuestra práctica, esto reduce re-trabajos y mejora la trazabilidad de gastos.

Justificación técnica y financiera

Acompañamos la justificación con plantillas de reporting, evidencias y checklists de auditoría. Ordenamos contratos, elegibilidad de costes, partes de horas y pruebas de entrega. Lo hacemos porque sabemos que un excelente proyecto puede comprometerse si la gestión financiera no está a la altura.

Comunicación y diseminación

Diseñamos la identidad del proyecto, plan de comunicación y acciones de visibilidad. No se trata de publicar por publicar: proponemos mensajes y formatos alineados a públicos objetivo y KPIs de alcance realistas.

 

Programas en los que trabajamos (Erasmus+, CERV, Interreg, AMIF, Horizon – cascade)

Conocemos la lógica, los criterios y las plataformas de los principales programas:

  • Erasmus+ (juventud, educación, deporte): proyectos de capacitación, movilidad, alianzas de cooperación y buenas prácticas. Encaja cuando hay una apuesta clara por el aprendizaje y la innovación educativa.
  • CERV (ciudadanía, igualdad, derechos y valores): ideal para gobernanza local, igualdad de género, participación ciudadana y protección de derechos fundamentales.
  • Interreg: cooperación territorial. Útil cuando existen retos transfronterizos o regionales que requieren soluciones compartidas.
  • AMIF (asilo, migración e integración): proyectos que apoyan la inclusión, el acceso a servicios y la cohesión social de población migrante.
  • Horizon – cascade funding: convocatorias de financiación en cascada enfocadas en digitalización, sostenibilidad, energía, movilidad, etc., interesantes para pilotos y escalado de soluciones.

En todos los casos, ayudamos a ajustar elegibilidad, presupuesto y cronograma, y a diseñar indicadores que permitan demostrar el impacto esperado.

 

Nuestro método: impacto medible y gestión sin sobresaltos

Hemos refinado un método que prioriza tres cosas: encaje, calidad y ejecución.

  1. Encaje: partimos de la estrategia local y de necesidades claras. Si el encaje no es sólido, no forzamos la propuesta. Es mejor esperar una ventana más adecuada que invertir tiempo y recursos en una candidatura débil.
  2. Calidad: nos obsesiona la claridad en objetivos, resultados e indicadores. Introducimos líneas base y metas alcanzables; evitamos “wishful thinking”. Aquí es donde más notamos la diferencia: una redacción afinada mejora la comprensión del evaluador y reduce las rondas de aclaraciones.
  3. Ejecución: operamos con gestión ágil. Cronogramas realistas, roles y responsabilidades definidos, gestión de riesgos, y comunicación fluida con socios. Cuando hablamos de agilidad no es una etiqueta: en proyectos recientes, esta forma de trabajar acortó tiempos de entrega de entregables en más del 20% respecto a planes iniciales, porque elimina cuellos de botella.

A esto sumamos herramientas propias: checklists de elegibilidad, matrices de riesgos, plantillas de reporting y guías de visibilidad. Son el resultado de lo que hemos aprendido en territorio, con equipos técnicos de administraciones y entidades sociales.

 

Casos y aprendizajes que nos han marcado

No listamos todos los proyectos, pero sí compartimos aprendizajes que repetimos a menudo:

Participación ciudadana y gobernanza (encaje CERV):

Cuando una ciudad quiere mejorar la transparencia y la interacción con la ciudadanía, planteamos un paquete de trabajo de escucha activa, prototipado y medición de confianza institucional. Aprendimos que si no hay un mapa de stakeholders claro, la participación se concentra en los mismos perfiles. Por eso creamos indicadores de diversidad y adoptamos estrategias de llegada a colectivos infra-representados.

Educación y juventud (Erasmus+):

Al impulsar redes de centros educativos y organizaciones juveniles, insistimos en evaluación formativa y seguimiento de competencias. El aprendizaje: los proyectos ganan cuando alinean la formación con resultados de aprendizaje medibles y no se quedan solo en actividades.

Sostenibilidad y medioambiente (Interreg / Horizon – cascade)

En pilotos de economía circular, es clave medir impacto en términos de reducción de residuos, huella de carbono o eficiencia energética. Integramos indicadores desde el día uno y cerramos el círculo con planes de explotación.

Inclusión y migración (AMIF)

La clave es el diseño con enfoque de derechos, accesibilidad y coordinación con servicios locales. El aprendizaje: si los itinerarios de inserción no contemplan barreras administrativas y culturales, los resultados se diluyen. Por eso, proponemos mentoría y acompañamiento integral.

 

Preguntas clave antes de empezar (plazos, documentos, consorcios)

Hay tres conversaciones que nunca saltamos:

Plazos

Confirmamos ventanas de convocatoria, tiempo de redacción y periodo de ejecución. Un buen proyecto necesita margen para recopilar evidencias, cerrar partners y afinar el presupuesto.

Documentos

Pedimos desde el inicio estatutos, CIF/NIF, poderes, estados financieros, planes estratégicos y políticas relevantes (igualdad, sostenibilidad, protección de datos). Tenerlo a tiempo evita carreras de última hora.

Consorcios

Definimos el rol de cada socio y su valor añadido. Si falta un perfil, lo buscamos; si sobra, lo decimos. Un consorcio equilibrado aumenta puntuación y reduce problemas en ejecución.

 

Preguntas frecuentes

¿Qué documentos necesitamos para preparar una propuesta competitiva?

Un dossier con información legal y financiera actualizada, plan estratégico, políticas (igualdad, sostenibilidad), evidencias de capacidad técnica, y descripción de iniciativas previas. Añadimos plantillas para entregables e indicadores, de forma que la redacción salga coherente.

¿Cómo elegimos el programa adecuado (Erasmus+, CERV, Interreg, AMIF, Horizon)?

Empezamos por la necesidad y los beneficiarios, luego cruzamos con elegibilidad y criterios de evaluación. Si hablamos de aprendizaje y juventud, miramos Erasmus+; si el foco es gobernanza y derechos, CERV; para cooperación territorial, Interreg; para inclusión migratoria, AMIF; para innovación aplicada, Horizon – cascade funding.

¿Qué plazos y hitos debemos prever?

Suele haber una fase de scouting (2–6 semanas), redacción (4–8 semanas dependiendo de complejidad) y, si se aprueba, un periodo de ejecución de 12–36 meses. Ajustamos el cronograma a cada convocatoria.

¿Cómo se estructura un consorcio equilibrado y qué rol asumimos?

Buscamos diversidad geográfica y funcional, con entidades que aporten capacidad técnica, prueba piloto y escalabilidad. Nuestro rol típico: coordinación técnica, control de calidad, y soporte en reporting y justificación.

¿Qué métricas de impacto recomendamos desde el inicio?

Indicadores de resultado (cambios medibles en personas/entornos), de producto (entregables) y de proceso (calidad y tiempos). Siempre con línea base y metas realistas. Si el proyecto trabaja inclusión, por ejemplo, medimos acceso efectivo a servicios, permanencia y satisfacción.

¿Cómo evitamos incidencias en auditoría y devoluciones?

Con orden desde el día uno: partes de horas, contratos, pruebas de compra, elegibilidad de gastos y entregables firmados. Nuestras checklists y revisiones periódicas minimizan riesgos.

 

En Sequoia Pro ofrecemos asesoramiento en proyectos europeos

Dar el salto a Europa no es un fin en sí mismo: es un medio para acelerar cambios que la ciudadanía nota. Nuestro asesoramiento en proyectos europeos está diseñado para que las ideas locales se conviertan en proyectos financiados, bien ejecutados y mejor justificados.

Si buscas una consultoría que combine visión estratégica, metodología, cercanía y experiencia real en terreno, caminamos a tu lado desde el encaje hasta el cierre.

¡Contacta con nosotros!

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